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  Recuerdos y Añoranzas
 

Recuerdos y Añoranzas


El corazón es quien me dicta cuando escribo de mi pueblo; La Ribera de Folgoso, y a pesar de encontrarme lejos de él, parece que nunca me he ausentado...

Desde mi niñez hasta esta edad madura, han ido surgiendo cientos y cientos de acontecimientos sociales que sin lugar a dudas, han enriquecido nuestra vida, nuestra cultura y a nuestro entrañable pueblo: La Ribera.

Me emociono hoy cuando alguien a través de las redes sociales, internet, me envía alguna fotografía de aquella época.

¿Como podría expresaros mis emociones?

No existe en este mundo sensación mas emotiva, por eso no puedo dejar de sentir  en cada día de mi vida esas emociones que enriquecen mi alma. Yo también descansaré ahí, al lado de todos aquellos que nos han dejado. En compañía de todos los que seguirán escribiendo la historia de nuestro pueblo.

Recuerdo cuando era niño e iba a la escuela, primero con D.Óscar, luego con D.Sindo y D.Luis; de ellos guardo hermosos recuerdos y un enorme afecto, porque sin ellos, no sabría escribir...

Vuelven a mi mente aquellos hermosos días en los que jugando con mis amigos y compañeros de clase, aprendí el valor de la amistad, que hoy, después de tantos años cuando me encuentro con alguno de ellos veo que siente y recuerda las mismas añoranzas y vivencias que yo.


*Nota: (La época de la fotografía no corresponde con la que se describe en el texto)

Es que aquellos años fueron de suma importancia en nuestras vidas, tanto es así, que hoy lo seguimos sintiendo exactamente igual que lo hicimos entonces...

Ocupa en mi memoria un lugar destacado D. Francisco, cura-párroco de La Ribera de Folgoso en mi niñez. Con él aprendí el significado del amor, la diferencia entre niños y niñas, a perdonar y dejar que la humildad impregne todo nuestro ser. Él, me dio la primera comunión, también grandes, eficaces y hermosas lecciones sobre la convivencia y la participación colectiva sin pedir nada a cambio.

Recuerdo como si de hoy se tratara cuando hicieron la carretera N-VI y el túnel que une a Torre con La Ribera. La mina de Balín en funcionamiento, saliendo el carbón en vagones arrastrados por un mulo hasta el lavadero con sus torvas. Hoy todo ha cambiado, es la Mina Escuela y el túnel ya no funciona; otra obra nueva, la A6 lo dejó dormido con todos sus recuerdos.

En mi memoria está trabajando en aquel lavadero María, la hermana de Consuelo la mujer de Pedro "Riveiro" y los camiones de Manolo "Pataquina" cargando el carbón para la térmica de Ponferrada.

¡Qué curioso! hoy todas las calles del pueblo se encuentran asfaltadas, con alumbrado público y el Río Boeza en éste concreto lugar, nos ofrece cada verano un sinfín de posibilidades que en otra ocasión, a modo primitivo, ya nos ofreció y las calles de tierra, cuando llovía, se convertían en un verdadero barrizal... pero nunca nadie dudó en ponerse los zapatos nuevos, pese a todo...

Ángel Alonso Álvarez, 21 de mayo de 2011

 
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